lunes, 25 de noviembre de 2013

¿TIENES DIÁSTASIS?

¿TIENES DIÁSTASIS?

Sabemos bien que la mayoría de las mujeres no tienen ni buena información ni apoyo adecuado para poder recuperar bien el cuerpo en los meses y años después de dar a luz. Existe una gran falta de información, de buena calidad, que responda a las necesidades específicas de las mujeres durante el postparto tardío (o sea que, no solo las primeras semanas, pero incluso mucho tiempo después). No solo existe un vacío de información, sino también una gran cantidad de información de baja calidad. ¿Cuántos sitios webs has visto recomendando a las mujeres en postparto ejercicios para el abdomen? Desafortunadamente hay muchos, y el problema es que  ”se olvidan” de las condiciones o debilidades corporales muy frecuentes para las mujeres después de tener niños y que deben tenerse en cuenta a la hora de prescribir el adecuado ejercicio.

Una de las condiciones comunes del postparto, de la que no se habla o no se identifica a tiempo en muchas ocasiones, es la diástasis de los rectos abdominales. Es una separación de la musculatura del abdomen alrededor del ombligo. Durante el embarazo los músculos se separan de la línea media para ceder lugar al bebé. Al término del embarazo la musculatura debe volver de manera natural a su posición, pero a veces cuesta mucho esfuerzo, para que vuelvan a coger su posición original o incluso no llega a estar igual que antes.


 La diástasis de los rectos también puede manifestarse en mujeres que no han tenido niños o incluso en hombres con sobrepeso abdominal o que se han fortalecido en exceso. La diástasis normalmente no causa dolor ni incomodidad especial, más bien es un problema funcional:



1. Que la musculatura del abdomen no funciona de manera óptima, es decir, no haría su correcta función de cinturón natural pues está debilitada o cedida.

2. Como el cuerpo tiene que compensar las debilidades, podría acarrear dolores de espalda, debilidad del suelo pélvico por ejemplo.

3. La barriga no acaba de coger una forma plana, porque con la separación, el abdomen suele estar más protuberante.

También se nota que al hacer esfuerzo, la barriga sobresale con una forma extraña , como una cresta vertical, que demuestra la función no optima de la musculatura.

El efecto de los ejercicios hipopresivos en la diástasis abdominal.

Se ha podido investigar que existen varias técnicas para reducir la diástasis y recuperar el abdomen después del postparto. Todas estas técnicas tienen en común es que evitan el sobreesfuerzo del abdomen, ejercitan la musculatura más profunda del abdomen e intentan proteger el suelo pélvico. Pero de todas ellas, hemos comprobado que los ejercicios hipopresivos producen una gran mejoría para la separación muscular y en menos tiempo. Las otras técnicas a pesar de ser también estupendas y conseguir resultados lo hacen de manera más lenta y con mayor número de sesiones. Por eso hemos escogido los hipopresivos pues son muy completos y corrigen la posición de los músculos a la vez la posición de la columna. También ayudan a tonificar el conjunto de músculos que necesitan recuperación después de dar a luz. Los hipopresivos ayudan a “succionar” el suelo pélvico en vez de empujarlo hacia fuera del canal vaginal, en definitiva ayudan a la recuperación del tono de esta zona a la vez. Tener cuidado en el postparto de abusar de ejercicios o situaciones que hagan lo opuesto…pues presionar el suelo pélvico sobre todo en condiciones de debilidad podría causar mayor debilidad.

Realizar 20 minutos de hipopresivos al día durante 3 meses se puede conseguir reducir la separación muscular de 2 a 3 dedos de ancho. 
Se puede conseguir una gran mejoría si creas un hábito. La constancia es clave. Durante un tiempo se realiza ese trabajo constante,luego basta con realizar un trabajo de mantenimiento en función de lo que te recomiende tu profesional.

FUENTE : www.metodohipopresivo.com